Los excedentes son la energía eléctrica producida por la instalación fotovoltaica y no autoconsumida. Si no se cuenta con un sistema antivertido, estos excedentes se vierten a la red eléctrica para ser utilizados por el resto de consumidores.
En la modalidad de autoconsumo con excedentes y con compensación, los excedentes no autoconsumidos se retribuyen al cliente en la factura de electricidad.
No es un balance neto sino una facturación neta, ya que los excedentes se pagan a un precio menor al de la energía consumida de la red, porque solo se compensa el coste de la energía, no se compensan otros costes como los peajes de acceso.
Además, en cada factura, el pago de los excedentes no puede ser superior al importe del término de la energía consumida de la red.
Por este motivo siempre es más ventajoso para el cliente incrementar el % de autoconsumo directo (o de autoconsumo mediante baterías) que incrementar la cantidad de excedentes vertida a la red.